Aunque existen muchos grados de discapacidad intelectual y diferentes tipologías, hoy en día comprobamos con claridad que con constancia, formación, motivación y cariño, se pueden conseguir grandes avances en la autonomía de las personas con discapacidad intelectual.
Trabajar la autonomía, no solo conlleva más independencia para realizar tareas cotidianas y relacionarse con su entorno, sino que aumenta la autoestima y la dignidad, porque las personas más autónomas se sienten más libres para elegir y más valoradas.
Además, gracias a la autonomía, aumenta su afán de superación, su entusiasmo por aprender, su seguridad emocional y, en general, su felicidad. Las personas con discapacidad intelectual más autónomas, se sienten más integradas y más aceptadas en sociedad.
Pero, ¿qué es la autonomía?
Cuando hablamos de autonomía nos referimos a la capacidad de decidir por uno mismo y saber controlar el comportamiento sin necesidad de que otra persona realice las cosas o tome decisiones por él. No estamos hablando solamente de las tareas cotidianas, sino también de saber comunicarse en sociedad y ser feliz.
Educar para ser más autónomo requiere paciencia en las explicaciones, firmeza (pocas normas, pero claras), afecto y motivación positiva en los logros.
5 consejos para potenciar la autonomía
Partiendo de nuestra experiencia, hoy os dejamos estos cinco consejos que nuestros profesionales recomiendan para potenciar la autonomía y enseñar a nuestros hijos a ser más autónomos e independientes:
- Nos fijaremos en sus capacidades. Primero hay que conocer a fondo qué son capaces de hacer, por su grado de discapacidad o sus dificultades cognitivas o conductuales, tanto en actividades cotidianas como en determinación o desarrollo personal. Esto nos ayudará a no decidir por ellos y a valorar lo que sí saber realizar.
- Tendremos en cuenta sus gustos y preferencias. Nos ayudará para usarlos como motivación o como refuerzo cuando superen sus metas.
- Decidir pequeñas cosas. Ir planteando poco a poco varias opciones, teniendo en cuenta cada caso, para que ellos tengan la posibilidad de elegir tanto en sus actividades cotidianas como en otros aspectos como su tiempo de ocio, por ejemplo. Dar cierta flexibilidad y libertad para que tomen sus propias decisiones.
- Dar confianza. Creer en ellos, que son capaces de hacerlo y que noten que lo hacemos de verdad. El refuerzo verbal tiene efectos muy positivos y decir «œLo has hecho muy bien», «œEnhorabuena» o «œEstamos muy orgullosos de ti» es tan importante como ir todos a una, e implicar a todos los miembros de la familia.
- Paciencia y constancia. La autonomía requiere adquirir hábitos que se crean con tiempo y constancia. Aprender normas de convivencia, cumplir horarios, autocontrol, manejo del dinero»¦ son aspectos que cuesta interiorizar. Por este motivo, debemos ser progresivos y proponer pequeñas metas que se van alcanzando.
En definitiva, se trata de pautas y consejos útiles para mejorar la autonomía de cualquier persona, con o sin discapacidad intelectual. Consejos básicos que nos pueden ayudar a que sean y seamos más felices.
Y tú, ¿qué consejo darías?
Buenas noches!
Quisiera que me especificaran cuales son las obligaciones de un cuidador para atender a los chicos mayores discapacitados mentales en viviendas tuteladas.
Quien les enseña a ser autí³nomos; no me refiero a las ABVD sino al aprendizaje para hacer tareas en casa.
Es la educadora, la gobernanta, el cuidador…?
Gracias.
Un saludo
¡Hola, Manuela!
Disculpa la tardanza en responder. Respecto a tus dudas, te contamos:
las personas que viven en el Proyecto de Vida Independiente tienen un nivel de discapacidad intelectual leve.
Los apoyos que les prestamos son los necesarios para que puedan tener una vida lo más normalizada posible e integrada en la comunidad. Cada persona tiene una serie de habilidades y capacidades que se intentan potenciar; y se les apoya en aquellas que tienen alguna dificultad.
Las funciones de las personas que trabajan en atencií³n directa vienen definidas por el Convenio Colectivo que se aplica en nuestra entidad; y se definen de la siguiente manera:
Cuidador/a. Competencia general: Atiende a personas dependientes en el ámbito sociosanitario en la institucií³n donde se desarrolle su actuacií³n, aplicando las estrategias diseñadas por el equipo interdisciplinar competente y los procedimientos para mantener y mejorar su autonomía personal y sus relaciones con el entorno. Referencia Atencií³n sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales. Nivel 2
Esperamos que tus dudas hayan quedado resueltas.
Si deseas conocer más sobre el Proyecto de Vida Independiente, puedes ponerte en contacto con nosotros y te resolveremos cualquier otra cuestií³n que te pueda surgir.
¡Un saludo!