Granja de Martillué

La granja escuela de Martillué: un proyecto con alma

En el Centro Ignacio Claver de Martillué, la granja escuela es una de nuestras iniciativas más emblemáticas y queridas. Iniciada en 2011, la granja comenzó con un equipamiento básico de animales domésticos, proporcionando un espacio de trabajo y desarrollo personal para las personas del centro. Con el tiempo, este proyecto ha evolucionado, convirtiéndose en un verdadero símbolo de nuestro modelo de atención y compromiso con la inclusión y el desarrollo integral.

Desde 2013, abrimos nuestras puertas a visitas escolares, acogiendo cada año a más de 500 niños y niñas de colegios y escuelas infantiles de la zona. Estas jornadas de aprendizaje y disfrute en el medio natural son guiadas por las personas del centro, quienes comparten sus conocimientos y experiencias con los visitantes más jóvenes.

En 2019, ampliamos nuestras instalaciones con un huerto ecológico y un invernadero accesible, lo que nos permitió diversificar nuestras actividades y ofrecer nuevas oportunidades de aprendizaje y participación.

Nuestra historia

  • Visita a la granja «Los granjeros de Martillué»: Conoce de cerca a nuestros animales y el trabajo diario en la granja, de la mano de nuestros granjeros.
  • Taller de inclusión SinIgual: El valor de la diferencia: Una actividad para aprender sobre la discapacidad, la importancia de la diversidad y la inclusión.
  • Taller de chapas e imanes de la Granja: Un ratito para la creatividad y la diversión para todas las edades.
  • Visita al huerto ecológico: «Los héroes del huerto»: Descubre cómo cultivamos de manera sostenible y respetuosa con el medio ambiente.

Un enfoque participativo e inclusivo

En la granja escuela de Martillué, las actividades productivas no solo proporcionan sentido y estructura al día a día de las personas del centro, sino que también promueven un estilo de vida saludable y activo en pleno entorno rural. Producimos huevos para la venta a familias y trabajadores, y cultivamos un huerto ecológico para el autoconsumo y las visitas escolares.

Las personas con discapacidad son protagonistas de este proyecto, contribuyendo a la comunidad con productos y servicios de valor reconocido. Su trabajo no solo fomenta la sostenibilidad, sino que también sensibiliza a la sociedad sobre la importancia de la inclusión y el respeto por la diversidad.