La directora del INAEM conoce Valentia Emplea y visita BROTALIA
La directora gerente del Instituto Aragonés de Empleo (INAEM), Ana López, visitó ayer las instalaciones de Valentia Emplea, el centro especial de empleo de Valentia, junto a la directora de la entidad, Sara Comenge, y los responsables de las diferentes áreas de Valentia Emplea, Eduardo Sarasa y Roberto Lacambra.
Durante la visita, la directora del INAEM, acompañada de Carmen Laúna, directora provincial y Recaredo García, Secretario General del Instituto Aragonés de Empleo, pudieron conocer en primera persona el trabajo del centro especial de empleo- que centra su atención en los servicios de limpieza, jardinería y huerta ecológica-, en el que trabajan 113 trabajadores, de los que 79 tienen discapacidad.
También pudo analizar el desarrollo de los dos programas experienciales de empleo y formación del INAEM que actualmente desarrolla Valentia. Uno, bajo el título “Todo en orden II”, que tiene lugar en Huesca; y un segundo ubicado en Monzón, denominado “Valentia Documenta”.
A ellos hay que añadir el programa “EMPLE-AR”, que posibilita contratar a cuatro trabajadores a jornada completa durante diez meses; y “JOVEM”, que beneficia a un trabajador más. Asimismo, el “Programa Empleo con Apoyo”, que cuenta con catorce subvenciones para la contratación de preparadores laborales, acciones de prospección y costes indirectos.
La gerente de Valentia, Sara Comenge, agradeció la visita de la directora general del INAEM, Ana López, a Valentia y, en concreto, a Valentia Emplea. “Consideramos imprescindible que las personas que toman las decisiones conozcan de primera mano las realidades de los centros especiales de empleo en los que trabajan personas con discapacidad intelectual, de ahí la importancia de que hoy estén aquí con nosotros”.
Comenge recordó que “las personas con discapacidad intelectual, son personas consideradas especialmente vulnerables a la hora de encontrar un empleo, personas con especiales dificultades de inserción. Las tasas de actividad y empleo de las personas con discapacidad intelectual y enfermedad mental son significativamente inferiores a las de otros tipos de discapacidades”.
